1-El aviso inoportuno
Un buen día, a las autoridades de Hacienda se les ocurre decir que los Estados tienen que vigilar su endeudamiento, que algunos no han declarado todas sus deudas, invita a reestructurar esos pasivos con BANOBRAS y dice que va a endurecer las reglas para la asignación de fondos a los Estados.
Como si las palabras del Secretario hubieran sido la señal de inicio que da el réferi en una pelea de lucha libre, acto seguido se suben al ring los del PAN, PRD, PRI (en estricto orden alfabético) y empieza una campal de todos contra todos. El líder del PAN dice que la culpa es de los gobernadores del PRI que son los más endeudados, el del PRI revira que entonces dónde queda Reynoso Femat, el del PRD se siente desplazado y declara, triunfante, que el DF es la entidad más endeudada, pero después de un rato se acuerda que en este contexto, mayor deuda significa mayores problemas y cambia su declaración, exigiendo que Hacienda explique el fundamento jurídico de ponerle tantos peros a la deuda de los Estados Libres y Soberanos, como si una declaración en el sentido de que hay que vigilar la deuda y reestructurarla en las mejores condiciones posibles necesitara un artículo en la Constitución. La lucha seguirá así por unos días más, y probablemente terminará en un empate generalizado cuando los representantes de los partidos se acuerden que se están exhibiendo y que lo mejor es no hacer olas.
Podemos describir este circo de otra manera: los personajes públicos han politizado el asunto de la deuda de los Estados, y aquí recurro a la edición 2011 del Diccionario de María Moliner, que dice:
POLITIZAR. Del griego πολιτικός, relativo a los ciudadanos. Originalmente significaba dar dimensión política a un asunto que no la tenía. Actualmente significa enredar un asunto, hablar sin ton ni son, convertirlo en algo incomprensible, hablar por hablar; acciones por lo general ejecutadas por personajes públicos que pretenden crear descontrol y aplicar en su beneficio la máxima a río revuelto, ganancia de pescadores.
2-A falta de sentido común, al menos que haya diversión.
Nuestra Constitución ha creado en el Gobierno Federal la entidad más poderosa del país, porque toma las decisiones que tengan que ver con todo el país, recauda la mayor cantidad de ingresos, controla a las fuerzas armadas, y reparte el pastel del presupuesto. No podría ser de otro modo, a menos que no quisiéramos tener un país. Al GF le toca la mayor parte del presupuesto, y de lo que reparte a los estados en el Ramo 33 (aproximadamente el 13% del presupuesto total) está ahora llamando la atención, diciendo que hay entidades más endeudadas que otras y que hay que vigilar el endeudamiento, sugiriendo que busquen la manera de hacer más tolerables los pasivos, y ya que los consejos son como las llamadas a misa (todos las oyen, asisten los que quieren) le avisa que va a poner reglas más estrictas.
Hasta aquí, el Secretario no dice sino lo que es de sentido común. Sin embargo, la situación de la política en México del 2000 para acá me recuerda lo que pasaba en la Facultad de Ciencias de la UNAM cuando yo estudiaba ahí. Existía el Director de la Facultad y todo el aparato administrativo necesario, pero había una estructura de gobierno paralelo en cabezada por la Asamblea de la Facultad de Ciencias. Su misión principal era decir que no a todo lo que las autoridades dijeran que sí. ¿Iban a empezar los exámenes el 19 de marzo? Está mal, porque ese día se recuerda la muerte de Mikhail I. Kalinin (1875-1946), quien fue Presidente del Soviet Supremo de la URSS. ¿El curso de Ecuaciones Diferenciales se programa en el salón A123? Inaceptable, porque ahí sesiona en forma permanente el subcomité para Asuntos Transcendentes de la Asamblea. Cuando no hallaban una razón para oponerse, sacaban el as bajo la manga: “nunca fuimos consultados, por lo tanto rechazamos esa disposición”.
Nuestros H. Senadores y Diputados me recuerdan aquella Asamblea cada vez que se suben al ring para politizar algún asunto, y ya que no puedo hacer nada para que se serenen, al menos me divierto leyendo lo que hacen, y me he hecho a la idea de que entre las garantías que debería hacer valer nuestra Constitución está el Derecho a la Diversión; por lo que a mí respecta, me considero servido con las actuaciones de diputados y senadores.
En este caso, el Premio al mejor Oso Político se lo lleva el PRD, que impulsa un punto de acuerdo para que Hacienda informe del Sustento Jurídico relacionado con sus pretensiones de que los Estados enderecen su deuda. ¿Necesitamos una justificación jurídica para analizar la deuda y tomar las mejores decisiones? Si es así, yo solicito un punto de acuerdo para que el PRD justifique jurídicamente su petición del otro punto de acuerdo…
3-Las verdades de los números.
Como yo no necesito ningún punto de acuerdo, me di a la tarea de analizar la situación de la deuda de los Estados, a partir de datos obtenidos de la Secretaría de Hacienda y del INEGI. Los resultados que obtuve son los siguientes.
a) Algunos Estados manejan parte de sus deudas sin declararlas a Hacienda, pero Hacienda confiesa a los bancos y entonces publica las diferencias. Los Estados que se llevan la pauta en cuanto a deuda no declarada son Coahuila (283.9%), Zacatecas (167.9%) y Tabasco (88.3), midiendo la proporción entre deuda encontrada/deuda declarada. Ags. es el lugar 24, con -9.6% (declaró más de lo que encontró Hacienda).
b) Estados más endeudados: DF ($55,200 millones), Edomex ($40,738.3 millones), Nuevo León ($36,903.5 millones). Ags. es el lugar 24, con $2,305 millones.
c) Proporción de deuda contra ingresos anuales por Ramo 33: DF (605.85%), Chiuhuahua (506.16%), Nuevo León (261.49%). Ags es el lugar 17, con 44.97%.
d) Deuda por cada ciudadano: Coahuila ($11,633), Quintana Roo ($8,261), Nuevo León ($7,930). Ags es el lugar 19, con $1,946.
e) Deuda por km2: DF ($37,322,515), Edomex ($1,907,670), Nuevo León ($568,411). Ags. es el lugar 4, con $421,477.
De estos parámetros, en mi opinión el más importante la proporción entre deuda e ingresos por Ramo 33, ya que el Ramo 33 es una medida (aunque incompleta) del ingreso de los estados, y porque cualquier deuda se califica en base a la capacidad de pago del deudor, y todos los demás parámetros están subordinados a este. Por ejemplo, la deuda por km2 del DF es de esperar y no es alarmante, porque es muy pequeño y ahí residen los poderes federales. Sin embargo, su proporción de endeudamiento vs. Ramo 33 es preocupante, porque significa que debe los ingresos de seis años del Ramo 33, sin contar intereses.
Con estos parámetros, Aguascalientes está en una situación menos mala que la mayoría de los estados, puesto que nada más debe el 44.97% de sus ingresos anuales del Ramo 33. Al final de este artículo está una tabla con el análisis realizado por el autor.
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