La 2ª Guerra Mundial estalló con el motivo del Corredor del Danzig, porque Hitler quería unir las dos partes de Alemania en 1939: lo que es a grandes rasgos la Alemania actual, y Prusia Oriental, que ahora es parte de Rusia. Hitler invadió Polonia porque ésta no aceptó que los alemanes hicieran ese corredor.

Por el contrario, uno de los episodios más vergonzosos de la historia de México es este tratado, firmado en Veracruz el 1.12.1859  por McLane y Ocampo, representantes de sus presidentes: Benito Juárez y James Buchanan; México autorizaba a EEUU a hacer no uno sino tres corredores, a perpetuidad. En este episodio México jugó el papel de víctima y EEUU vendió caro su amor, que consistía en el reconocimiento al que firmara entre liberales o a conservadores, al precio de los tres corredores; como los conservadores rechazaron vender más pedazos de México a EEUU pero Juárez sí aceptó hacerlo, fue Juárez quien obtuvo el reconocimiento a su gobierno y al final ganó. La historia la escriben los vencedores y los gobiernos que siguieron pusieron a Juárez en un pedestal del que todavía no se cae; en cambio los conservadores se convirtieron en traidores; en otras palabras, por decreto Juárez es un héroe y los conservadores son escoria. Pero el fondo de la historia es mucho más complicado, y tanto Juárez como el presidente conservador Miramón tuvieron que enfrentarse a situaciones imposibles, a la herencia acumulada de años de problemas internos en las que no había manera de hacer todas las cosas bien, sino casi ninguna.

1-Antecedentes: la expansión de EEUU

Cuando desembarcaron los primeros colonos puritanos ingleses en Virginia y Pennsylvania, llegaron a un lugar lejano de Europa pero conservando las convicciones protestantes y calvinistas de ser mejores que los demás y ser los elegidos de Dios. La ética protestante declara que la fe en Dios es lo único que puede redimir al hombre; también declara que Dios da el don de la fe a sus elegidos, y que no importa lo que se haga, sino lo que importa es ser elegido de Dios o no serlo. Ante la falta de una señal divina irrefutable de ser elegido, algunas comunidades reforzaron ciertas virtudes en su forma de vida, y declararon que la pertenencia a esas comunidades de hombres virtuosos era una señal de elección. En términos prácticos, se generaron tres convicciones:

  • La comunidad era un grupo de elegidos
  • Las acciones individuales no tienen peso para fines de salvación sino solamente la fe de los elegidos, por lo tanto, no importa lo que se haga, siempre y cuando sea un elegido.
  • Los no elegidos no cuentan.

Esta es una evolución del concepto bíblico de que los judíos son el pueblo elegido, pero sin los inconvenientes de la Ley Mosaica, extremadamente prolija en los detalles.

A medida que las cosas fueron saliendo bien en Norteamérica, los colonos, sus descendientes y los inmigrantes posteriores reforzaron su convicción de ser punto y aparte entre las miserias de este mundo. No padecieron las incontables guerras europeas, no tuvieron que tomar partido por nadie, nada más se les requería obediencia a un rey muy lejano. La tierra escasa de Inglaterra se había vuelto tierra en abundancia, regada por innumerables ríos y que podía ser aprovechada para crear ciudades y para la agricultura, y eso hicieron durante 150 años: pudieron vivir en paz y prosperar, y aprovecharon la oportunidad, impulsados también por su herencia protestante de una ética de trabajo, y trabajaron.

Con respecto a los indígenas, no se mezclaron; los mataron o los fueron arrojando hacia el Oeste.

Cuando termina la guerra de Independencia (1783) se convirtieron en un grupo homogéneo (blancos descendientes de ingleses, holandeses y alemanes), mayoritariamente protestante, dueños de un país aproximadamente 10 veces mayor que Inglaterra, y con un poco menos de población. Tuvieron además la fortuna de contar con un grupo de hombres extraordinarios que establecieron, en la Declaración de Independencia y en la Constitución, las bases de un país que no ha cambiado en su organización política, y que solamente ha librado una guerra interna en toda su historia. Hicieron una república democrática, donde todos eran iguales, con libertad religiosa. Aumentó la sensación interna de bienestar, de que estaban haciendo las cosas bien, y de que efectivamente, eran un pueblo elegido.

La fortuna los ayudó cuando Francia les ofreció en 1803 la venta de la Luisiana, superficie igual a la que ya tenían, atravesada por el caudaloso Mississippi; superficie plana y aprovechable para agricultura, ciudades, y comercio. Una vez más fueron confirmados en su posición de pueblo elegido, y con más ganas aún, se lanzaron a la exploración y colonización de los territorios del Oeste. Empezaron a recibir oleadas de inmigrantes europeos, principalmente de Inglaterra e Irlanda. Puestos en los zapatos de ellos, todo les sonreía y el futuro se veía promisorio, puesto que el territorio, el bien más preciado para una nación, lo tenían ahí a la mano y era nada más cuestión de pedirle una concesión al gobierno, a un precio nominal, establecerse y ponerse a trabajar. Norteamérica estaba habitada hacia 1700 por unos 300,000 indígenas, pero

  • eran poblaciones nómadas (no construían ciudades como los europeos),
  • no eran blancos, por lo tanto
  • no había que preocuparse de ellos, eran descartables y podían los blancos apoderarse de sus tierras o matar a los indios y no pasaba nada.

Los sucesos de la vida práctica reforzaban su creencia en ser pueblo elegido y en la impunidad de sus actos, siempre que no fueran cometidos contra la comunidad blanca.

Los problemas para definir fronteras al sur y al oeste siempre se resolvían favorablemente a EEUU. En 1817 Andrew Jackson corrió a los españoles de Florida, y luego se la compraron a España. Un éxito más.

Seguía Texas, y la situación era ésta:

  • oficialmente pertenecía a Nueva España / México, que estaba en guerra de independencia
  • la Nueva España nunca le había hecho caso, y los mexicanos tampoco, prefirieron acomodarse en terrenos menos favorables para la agricultura (casi todo México), explotar las minas de plata y no alejarse demasiado del Centro. Los mexicanos somos todos de la familia Muégano.
  • era extensa, también tenía muchos ríos y era plana, i.e., ideal para colonizar. Los norteamericanos han tenido un ánimo aventurero que nunca tuvieron los mexicanos y lo pusieron en práctica en Texas.
  • Stephen Austin y Sam Texas obtuvieron permiso de los ingenuos mexicanos para colonizar Texas, en números controlados, convirtiéndose al catolicismo. Lo hicieron de dientes para afuera.
  • La población de origen norteamericano era más abundante en 1836 que los mexicanos, en proporción 10 a 1.

Naturalmente los texanos, apoyados por EEUU, se rebelan contra México, Santa Anna viaja con un ejército que se quedó dormido y fue derrotado en San Jacinto (19.4.1836) por Sam Houston, y México pierde Texas. Lo que sigue fueron patadas de ahogado de México, y unos pocos años de vida de la República de Texas, hasta que fue admitida como estado por EEUU en 1845. Una confirmación más de que eran el pueblo elegido, probablemente más de alguno pensó que Dios había hecho que se durmieron los mexicanos para facilitar la victoria de Houston.

En 1845 el periodista John L. O’Sullivan inventó el término “Manifest Destiny” para darle una presentación teórica, mística y sociológica a esta idea de que EEUU era un pueblo elegido que tenía el destino manifesto de colonizar toda Norteamérica hasta el Pacífico, adueñarse de todo lo que pudiera y extender el ejemplo benéfico de su forma de gobierno a todo el Continente, etcétera. En Marzo de 1845 subió a la presidencia James Knox Polk, uno de los presidentes con más visión, coraje, y capacidad de decisión para favorecer la expansión de EEUU. Se fijó el propósito de comprar, anexar o conquistar lo que quedaba de México al oeste de Texas: California, Arizona y Nuevo México, que ya tenían algunos años de ser codiciados por EEUU. Polk provocó la guerra con México, la ganó en 1847, y se apropiaron del terreno que querían. Si querían una prueba más del Destino Manifiesto, ahí estaba.

El gran crecimiento creó el problema del transporte entre Nueva York y San Francisco. No había carreteras, los ríos no corrían de Este a Oeste, había desiertos en medio. Podían rodear hasta el Cabo de Hornos, pero eran varios meses de navegación. Habían buscado el camino híbrido hasta Panamá o Nicaragua, por tierra atravesar hasta el Pacífico, y luego otra vez por mar. Investigaron la geografía y eligieron tres puntos posibles: Panamá, Nicaragua (aprovechando el Lago de Nicaragua en medio) y Tehuantepec. Los intentaron los tres, y el último lo consiguieron fomentando la separación de Panamá de Colombia para crear un nuevo país en 1903.

2-La división de EEUU en norte y sur.

Aunque la Declaración de Independencia decía que todos los hombres eran libres e iguales, al igual que en La granja de los animales de Orwell (“aquí todos somos iguales, pero habemos unos más iguales que otros”), la Constitución permitió la esclavitud, que poco a poco se fue definiendo en dos zonas: los estados del norte, con la esclavitud prohibida, y los del sur, esclavistas. Se iban admitiendo nuevos estados a la Unión siempre en parejas, uno del sur y otro del norte, para conservar la misma representatividad en el Senado. Los del norte se industrializaron y fortalecieron la banca, y los del sur se volvieron dependientes de la agricultura y del trabajo esclavo. Como la esclavitud ponía al negro en situación de sumisión y volvía al blanco flojo y prejuicioso, según decía Lincoln, la esclavitud terminaba por esclavizar a todos. Poco a poco los estados del norte se hicieron más fuertes, llegaron a dominar el Congreso y se dedicaron a bloquear todos los intentos del sur por engrandecer a EEUU, aunque le podría convenir al país, porque conquistas al sur representarían más estados esclavistas y eso no era admisible para los del norte. La única excepción fue Polk, que manipuló las cosas provocando la indignación de su pueblo contra México, consiguiendo la guerra y por fin, adueñándose de California. Esta rivalidad fue la razón de que Texas tardara todavía nueve años (1836 a 1845) en ingresar a la Unión, después de que se había separado de México.

El resultado es que como nación, EEUU quería apoderarse de todo lo que se pudiera en México, Cuba y hasta donde llegaran, pero la división norte-sur bloqueaba la expansión hacia el sur.

3-México.

La situación a partir de la Guerra de Independencia en 1810 hasta 1855 se puede describir así:

guerra, levantamientos, asonadas, planes, pleitos, traiciones, robos, saqueos, pobreza, permanencia de desigualdades, empobrecimiento general del país, gobernado por inútiles y por payasos, descontento de la población, desunión,  abandono de la mitad norte del país, pérdida de Texas, pérdida de California, anarquía; en resumen, víctimas ideales de la depredación de cualquier potencia fuerte.

La gran interrogante es por qué sucedió así, al igual que pasó en muchas naciones de Latinoamérica, y por qué no sucedió en Estados Unidos.

Una explicación interna, difícil de probar, es que la mezcla de españoles e indígenas creó una raza en perpetuo descontento consigo misma: no somos ni indios ni españoles, y terminamos por aborrecer a unos y a otros y con esto, negamos nuestros orígenes y nos negamos una identidad. Encuentro dos pruebas actuales: el chiste de los cangrejos, y la anarquía legislativa que se ha dado a partir del 2000. En vez de aprovechar la inercia democrática que permitió un relevo de partido en la presidencia, por primera vez en 70 años, durante 11 años el Congreso se ha dedicado a bloquear cuanta iniciativa tiene el Ejecutivo, sin proponer mejores alternativas. En otras palabras, es como si los mexicanos nos aborreciéramos a nosotros mismos.

Hay una explicación externa que es muy fácil de probar: EEUU se dedicó sistemáticamente a debilitar a México desde que su Independencia en 1783, porque ambicionaba nuestros territorios. Como ejemplo está la correspondencia de Jefferson y la Doctrina Monroe. El agente que logró el mayor daño a México fue Joel R. Poinsett, un trotamundos que había conocido Rusia y Sudamérica y que sembró en México, desde la época de Iturbide, la semilla de la desunión, y consiguió crear un Partido Americano (que después evolucionó hacia los liberales) contra los que tenían simpatías por Europa, que después fueron los conservadores. El fue el instrumento principal de EEUU en los 1820’s para debilitar a México y facilitar el camino a las intenciones expansionistas de su país.

4-México de 1855 a 1859

Gobernaba Santa Anna por enésima vez, aunque se hubiera quedado dormido en San Jacinto, pero Juan N. Alvarez propone el Plan de Ayutla y lo arroja del poder. Nombra Ministro de Guerra a Ignacio Comonfort (hombre bueno, conciliador, indeciso, débil) y Ministro de Justicia a Benito Juárez. Juan N. Alvarez se reconoció incapaz de ser presidente, y renuncia; sube al poder Comonfort, quien quiere hacer un gabinete en donde reúna a liberales y conservadores, una utopía. Impulsado por Juárez, se proclama una ley que empieza a recortar los privilegios de la Iglesia y de los militares. En 1857 publican una Constitución de corte liberal. Los conservadores estaban de parte de la iglesia, del ejército y contaban con los más ricos, y organizaron un golpe de estado, poniendo de presidente a Félix María Zuloaga. Comonfort se va del país y Juárez se declara Presidente, de acuerdo a la Constitución. Los conservadores son más fuertes, Juárez huye y empieza la Guerra de Reforma.

Juárez anda errante por algún tiempo, hasta que en 1859 está en Veracruz y publica ahí una serie de normas que van dirigidas a

  1. Atacar a la Iglesia, ya que la considera causante de los males del país
  2. Nacionalizar los bienes de la Iglesia, que eran muchos
  3. Financiar de esa manera su gobierno.

Juárez tenía aversión por la Iglesia, y trató de capitalizar lo que él consideró un sentimiento popular para unificar al pueblo y para financiarse. Esto lo hizo inspirado en el estado laico de EEUU, y asesorado por sus conocidos allá. Desde el punto de vista de EEUU, la religión católica era un lazo de unión entre casi todos los mexicanos, y la Iglesia una institución fuerte. Si querían debilitar a México, había que debilitar a la Iglesia. Estaban siendo consecuentes con una de las ideas que dieron origen al Protestantismo: el escándalo de la Venta de Indulgencias, que hizo que Lutero y mucha gente en Alemania terminara por aborrecer el Papado y por extensión, toda la Iglesia Católica.

Pero en la práctica, y con la mayoría del país en manos de los conservadores, el provecho que Juárez podía obtener de la venta de bienes eclesiásticos fue muy pequeño. Poco a poco los conservadores fueron posicionándose en más lugares y la situación de los liberales se hizo más complicada, inclusive desesperada. El primer problema de Juárez era económico: mantener a su ejército y a su gobierno. Tendría necesidad de recurrir a los extranjeros, y el dilema era entre los europeos y los norteamericanos.

La misión de conservadores y liberales era ganar la guerra; la misión de los europeos era hacer negocios con México; la misión de EEUU era hacer negocios con México y quedarse con todo el territorio de México que se pudiera.

5-La oferta de EEUU

El presidente Buchanan había mandado a su emisario con la propuesta de que México vendiera Baja California, pero fue rechazado. Suavizaron los términos y propusieron derecho de tránsito por el Istmo de Tehuantepec, con la libertad de construir ahí un ferrocarril. A cambio del apoyo, ofrecía el reconocimiento del que aceptara el trato. Los conservadores rechazaron la idea, y Juárez la aceptó; ya se había brincado las trancas al promulgar Leyes que eran privilegio del Legislativo, y ahora lo volvería a hacer, enajenando partes de México. Quizá una de las razones de que EEUU es más poderoso es que sus gobernantes se la pensaron para adquirir más terrenos, como en la Luisiana, y en cambio algunos gobernantes mexicanos no le pensaron mucho para ceder terrenos a otro país. El 1.12.1859 firmaron en Veracruz el Tratado de McLane-Ocampo, que tenía los siguientes términos:

Obligaciones de México Obligaciones de EEUU
Se otorga el derecho de paso a perpetuidad a EEUU en los siguientes tres lugares:1-Istmo de Tehuantepec2-Camino de Guaymas a Nogales

3-Un camino que una Mazatlán con Matamoros, que EEUU podrá decidir dónde lo traza.

México se obliga a cuidar militarmente esos terrenos.

México establecerá centros de acopio al norte y al sur del Istmo de Tehuantepec

Pagará US$4 millones a México, de la siguiente manera:US$2 millones al momento.US$2 millones se reservarán para resarcir a los ciudadanos de EEUU que sufran pérdidas en sus bienes a causa de México

En la práctica, este tratado era una entrega de la soberanía de México, ya que:

  • Dividía a México en cuatro partes
  • Los norteamericanos serían dueños de facto de esos corredores.
  • Con el antecedente de los colonizadores de Texas, que a la postre lograron su separación, el porvenir era que EEUU se quedaría con Sonora y Baja California, cuando menos.

Juárez firmó un tratado nulo de pleno derecho, porque ningún presidente puede vender ni ceder ni enajenar territorio de su país.

El final de esta historia es curioso. Recordemos que en EEUU el Norte estaba peleado con el Sur, era víspera de la Guerra de Secesión (1862-1865). Buchanan era norteño y apoyaba a los del sur, pero lo hizo de manera estúpida y su gestión tiene la vergüenza de muchas acciones que hicieron inevitable la guerra. Buchanan presentó el proyecto al Congreso, ya contaba con la firma mexicana de Melchor Ocampo (y vergonzosamente, eso bastaba) pero en EEUU sí necesitaban la aprobación del Congreso, y los del Norte lo bloquearon.

México se salvó de perder una parte indeterminada del norte que todavía poseía, por la ironía del destino de que en EEU el tratado hubiera favorecido a los estados sureños. Por única vez desde el Big Bang, hubo justicia en esta Tierra, porque había desunión en tanto México como en Estados Unidos.

Juárez consiguió el reconocimiento de EEUU a su gobierno, y ahora es un héroe.

El texto original del tratado (en español) puede consultarse en mclane-ocampo.

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